Metida de lleno en mi hiperfijación por Rojo, blanco y sangre azul, de Casey McQuiston, estoy poniéndome al día con el resto de sus libros: Una última parada y He besado a Shara Wheeler. La cosa es que, el otro día, mientras buscaba información sobre el de Shara, me topé con un contenido adicional incluido en una edición especial del libro: entre otras cosas, una ficha de personaje de Shara Wheeler elaborada por McQuiston.
Y, para qué mentir, me hizo mucha ilusión. Siempre es interesante meterte en la mente del autor de una obra (sea del tipo que sea), conocer su proceso de creación, la manera en la que trabaja, curiosidades, etc. Además, quizá algo de ello te sirva y puedas aplicarlo a tu manera de organizarte.
La ficha de McQuiston es sencilla pero abarca bastantes características del personaje, lo que me parece un buen método a seguir sin acabar en un bucle de creación y documentación del que nos cueste salir. Por eso, es recomendable pensar los rasgos básicos y más importantes para conocer a nuestro personaje ¡y ponernos a escribir!
Como puedes ver en la imagen, la ficha que utiliza McQuiston se compone de seis bloques:
- El primero, dedicado a datos «básicos»: nombre, edad, lugar y fecha de nacimiento, signo del zodiaco, MBTI (test de personalidad), eneagrama, orientación sexual, género, raza y etnia.
- El segundo, sobre las características físicas del personaje: color de pelo, ojos, tipo de cuerpo, altura, rasgos y aesthetic.
- El tercero, centrado en tres aficiones, tres intereses, series/música/pelis/libros/cultura pop favoritos y si tienen redes sociales.
- El cuarto, sobre su familia, la relación con padres y hermanos, así como su infancia.
- El quinto, dedicado a sus rasgos o características positivas y negativas, sueños, defectos y miedos.
- Y el sexto, dedicado a datos más aleatorios, como talentos, peculiaridades e incluso qué hace en un día lluvioso (o mal día), cuál es su cita ideal o sus planes para la universidad.
Siéntete libre de eliminar los apartados que no necesites y añade todo lo que consideres oportuno. Al final, es adaptar las herramientas que tenemos a nuestro alcance para que nos ayuden de la mejor forma posible.
Esta ficha la puedes complementar con una más completa, de la que hablé en este post y que también te puedes descargar. ¡Espero que ambas te resulten útiles!
Cintia Fernández 